|
18 de mayo de 2007
Bueno,
otra vez Lilí con sus amiguitos para contarles la fábula prometida
de cada mes, y de Esopo para no variar porque me gusta mucho.
Esta
tiene que ver con una grulla y con un pavo real, ya sabéis, esos
pavos tan bonitos de colores verdes y azules con una gran cola que
parece un abanico pintado. La grulla, por el contrario es bastante
discreta en su plumaje y no llama mucho la atención y ahí encontramos
la historia que se cuenta.
Érase una vez un pavo real muy vanidoso y creído
porque tenía el más bello plumaje que un ave puede poseer y de eso
se enorgullecía delante de una grulla muy modesta en su colorido.
La llamaba vulgar y fea riéndose de ella a lo que la grulla le respondió
llena de sabiduría:
-No niego que puedas tener las más hermosas plumas
del mundo y que las mías no lo sean en absoluto, pero piensa que
las tuyas no te sirven para volar sino para presumir y que en cambio
las de esta humilde grulla le sirven para surcar el espacio, cosa
que tú no podrás hacer nunca a pesar de toda tu belleza y esplendor.
Y la grulla estaba en lo cierto;
no se debe despreciar a nadie porque carezca de belleza o le creamos
inferior a nosotros, pues cada uno es como es y tiene sus propias
virtudes que han de ser consideradas con respeto y admiración.
¡Hasta el mes de junio amiguetes!
Lilí
Artículos de Lilí: LOS
ANIMALES EN LA LITERATURA|LOS
ANIMALES ENTRE LA HISTORIA Y LA LEYENDA|DOCE
ANIMALES MUY IMPORTANTES|CUENTOS
DE NAVIDAD|LEONES Y GORILAS...|EL
GATO DEL NÚM. 10 DE DOWNING STREET|LA
PEQUEÑA HISTORIA DE TAI|NAVIDAD
2006
|
