Astrología, una palabra polémica

Polémica y difícil de explicar a un lego en la materia, porque se ha escrito tanto al respecto de esta antigua ciencia, tanto y no siempre bien, que el ciudadano de a pie generalmente la observa con cierto recelo.

Nació en Mesopotamia hace muchísimos siglos, varios miles de años, y nació porque el hombre siempre ha sentido curiosidad por conocer su destino.

(Destino, el dios implacable “al que los dioses temen”, según opinaban sabiamente los griegos).

La astrología, en sus principios, iba unida a la astronomía y el ser humano empezó a descifrar los secretos del cosmos al mismo tiempo que intentaba adentrarse en lo que le reservaba el futuro por mediación de los astros, que, en la antigüedad no se veían sólo como tales sino como divinidades a su vez, divinidades terrible o bondadosas según los poderes de los que estuvieran revestidos.

Pero es muy curioso comprobar que, apenas sin variaciones, nuestros signos astrológicos, planetas –en astrología a la Luna se la denomina planeta-, y el Sol, vienen a tener el mismo significado en las diferentes religiones que precedieron a las que ahora tenemos.

Así, en la América precolombina, por poner un ejemplo, nos encontramos con que a ARIES se le conocía bajo el nombre del Esplendor de Carnero, a TAURO como el Macho poderoso, a GÉMINIS las Estrellas Unidas, a CÁNCER la Culebra dormida, a LEO el Retorno de la lanza del León escondido y rampante, a VIRGO la Madre divina, a LIBRA, o BALANZA, por La Escalera, lo que nos recuerda el ritmo ascendente-descendente que también posee una balanza, a CAPRICORNIO se le denominaba el Ciervo ardiente o cornudo, y ACUARIO simbolizaba la Época de las aguas.

(La descripción de los tres signos que faltan, ESCORPIO, SAGITARIO y PISCIS, no la tenemos debido al celo destructivo de los misioneros, ya que mucha documentación azteca y maya se perdió así irremisiblemente).

Casualidad o no, esas similitudes descriptivas son un hecho verificable.

El por qué el hombre atribuyó determinadas influencias a planetas, Sol y constelaciones, convertidas en signos zodiacales, constituye un enigma, pero que las influencias han existido, y existen es también un hecho que se puede leer en las Cartas Astrales, o Temas Natales, de personajes famosos cuyas vidas son fácilmente comprobables según apreciaremos más adelante a través de los artículos, anécdotas y otras biografías que se irán ofreciendo al lector.

© 2001 Estrella Cardona Gamio

 

 

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